AlexanderSC

CRÍOS. Sigo siendo un crío, apenas si conozco al mundo y apenas me conozco a mi mismo. Sigo siendo un crío, no he madurado ni un segundo, no me ha servido mi agudo oído, y se destruye poco a poco mi mundo. Fui tan inocente tanto tiempo, fui tan susceptible al calor y al viento. Hoy he vuelto a nacer; hoy el mundo me vera crecer; porque yo no conocía las nociones de dolor o sufrimiento: yo no sé lo que es llorar sangre, tampoco sé lo que es estar muerto. Yo que creía llegar tan a tiempo, hoy me doy cuenta de que voy tarde. Sigo siendo un niñato: tan superficial y tan poco relevante, tan inocente

Deja de aullar bestia enloquecida, y concéntrate en la tranquilidad del exterior. ¿Qué no ves la corteza enmohecida, o escuchas el cantar del ruiseñor? Todo brilla de una infinita alegría; Y tú hundido en tu depresión... Haz a un lado tu fría coraza, esa que no deja respirar a tu corazón, solo sienta el aire a tu alrededor. Cierra los ojos y siente infinitamente; todo es mejor de lo que parece. No te mientas, no pasa nada, de cuervos no vuela ninguna parvada. Tu vida se lo merece, no seas idiota y sonríe con creces. Disfruta del calor del sol, y de un amigo su fidelidad, o de

MORIR PARA SOBREVIVIR. (Cuarta Parte). Tomamos un pequeño camino imaginario. Caminamos en el bosque entre los árboles con cuidado, pero con una agilidad bastante insólita. La capa profunda de nieve no nos permitía avanzar como hubiésemos querido, sin embargo, tampoco nos dificultaba demasiado el paso. Después de un momento ya le habíamos agarrado la maña al terreno. La luz se filtraba por entre las ramas más secas, dejándonos ver el brillo dorado del día sobre la nieve blanca. A pesar de sentirme tan mal y de alguna forma abandonado por dentro, aquellas bellas imágenes a mi alreded